La Mesa de Articulación Indígena del Paraguay (MAIPy) impulsa proyectos dedicados a la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas y la protección de sus territorios. Entre sus iniciativas destacan la regularización legal de tierras y la restitución de territorios ancestrales, lo cual supone garantizar el derecho a la tierra como base para otros derechos fundamentales. Esta organización también registra denuncias por violaciones de derechos humanos y ambientales en comunidades indígenas, colaborando con actores estatales e internacionales para garantizar protección y reparación.

Además, MAIPy trabaja en la promoción del desarrollo integral de las comunidades indígenas, incluyendo salud, educación, gestión ambiental sostenible y participación política. A través de la articulación con otras organizaciones indígenas y la formulación de herramientas de incidencia política, busca que las políticas públicas reconozcan sus saberes ancestrales y respeten el consentimiento libre, previo e informado. Esta vía de intervención fortalece la voz indígena en procesos nacionales de toma de decisiones y visibiliza sus reivindicaciones.

El aseguramiento de tierras es fundamental para las comunidades indígenas porque garantiza la protección legal y el reconocimiento de sus territorios ancestrales. Estos espacios no solo representan una fuente de recursos naturales, sino también la base de su identidad cultural, sus prácticas tradicionales y su organización social. Cuando se reconocen y protegen jurídicamente, las comunidades pueden ejercer plenamente sus derechos colectivos, preservando sus modos de vida y fortaleciendo su autonomía.

Además, asegurar la tierra permite a las comunidades indígenas enfrentar amenazas como la expansión agrícola, la minería, la tala ilegal y otros procesos de despojo. Con un control claro sobre su territorio, pueden gestionar mejor sus recursos, implementar planes de desarrollo comunitario y conservar la biodiversidad que han resguardado por generaciones. En este sentido, el aseguramiento territorial no solo beneficia a las comunidades indígenas, sino también al equilibrio ambiental y al bienestar social en general.

El cambio climático es un fenómeno global causado principalmente por la actividad humana, que altera los patrones naturales del clima. El aumento de gases de efecto invernadero genera el calentamiento del planeta, provocando sequías, inundaciones, pérdida de biodiversidad y afectaciones en la producción de alimentos y la salud de las personas.

Frente a esta crisis, es fundamental promover acciones sostenibles y políticas que reduzcan las emisiones y protejan los ecosistemas. La educación ambiental, la reforestación y el uso responsable de los recursos son claves para mitigar sus efectos y asegurar un futuro equilibrado para las próximas generaciones.

La etnoeducación es un enfoque educativo que reconoce y valora la diversidad cultural, lingüística y espiritual de los pueblos indígenas y afrodescendientes. Su objetivo es garantizar una educación pertinente y contextualizada, que respete las identidades, los saberes ancestrales y las formas propias de aprendizaje de cada comunidad.

Este modelo promueve la participación activa de las comunidades en el diseño de los contenidos, métodos y materiales educativos. Así, la etnoeducación fortalece la identidad cultural, fomenta el respeto intercultural y contribuye a la preservación de los idiomas y conocimientos tradicionales, en armonía con la educación nacional.